¿Perdiste tu camino?
Usa tus viajes para encontrar claridad


Nadie puede negar que la vida a veces se pone cuesta arriba y encontrar claridad es el reto más grande.

No me hace falta leer mentes para saber que es algo común, pero en este caso lo digo por mi. En algunos momentos mi vida se ha sentido como cuando abres la lavadora al final del ciclo: un completo enredo que no sabe uno ni por donde entrarle.

En esos momentos me sobran pensamientos de «No tengo ni idea de que estoy haciendo», «no sé como voy a salir de esto» o simplemente «¿Qué #*##*?».  La cereza del pastel es cuando me visita la ansiedad y le agrega más confusión a la receta. 

¿Te suena familiar?

encontrar claridad

Es la vida real, así nos pasa a TODOS, aunque muchas veces no parece y nos sentimos dueños de la patente del caos. Lo que pasa es que nos hemos vuelto expertos en fingir que todo está bien, que somos un éxito y podemos solos. Como ser vulnerables es mal visto entonces nos ponemos la capa de superpoderes y seguimos. Por eso es muy fácil creer que medio mundo tiene la vida resuelta y uno… está lejos de eso. 

Aunque no es la única forma válida que existe, hoy te quiero contar como en un viaje puedes encontrar las herramientas para enfrentar esos momentos donde no encontramos sentido ni salida y como llevarte ese aprendizaje para usarlo el resto de tu vida.

¿Un viaje? Pero eso es muy caro

Un viaje, en mi definición, es salir de el lugar físico en que vivimos todos los días, dicho de otra forma ir a un lugar nuevo.

No implica necesariamente cambiar de país o continente, ni pagar hoteles o tours. En realidad lo que implica un viaje es cambiar la manera de ver el mundo y la vida, cosa que se nos facilita en un lugar diferente.

La metáfora de la piscina

Esos momentos de crisis que todos pasamos se explican muy bien con la metáfora de la piscina:

Imagínate una fiesta familiar en una finca preciosa, de esas que tienen una mega piscina.

Estás dentro del agua con tu buen sombrero para protegerte del sol, alguna bebida refrescante en la mano, mientras que los sobrinos corren y juegan.  El primito está aprendiendo a nadar, y el tío le hace muecas a la nieta de 8 meses que está en su flotador riéndose a carcajadas.

Entonces te das cuenta que se te perdió un arete.

Entras en pánico porque en primer lugar te gustan mucho esos aretes! Y en segundo piensas que alguien puede hacerse daño con él.

Dándole respuesta obvia al pánico te quitas el sombrero y dejas las bebida al lado para meterte a buscar el bendito arete. Te sumerges y buscas, mientras te cae encima el sobrinito que se tira en clavado a la piscina. Aumenta el caos, hasta que terminas dando gritos para que te ayuden los demás, porque no lo encontraste por ningún lado.

Ese es el caos. Estamos claros hasta ahí.

¿Que pasaría si nos salimos un momento de la piscina y dejamos que el agua se calme? Desde afuera tenemos una mejor perspectiva, tanto de la piscina como de la vida. 

encontrar claridad

Un viaje hace exactamente eso, te saca de un lugar donde has pasado buenos y malos ratos pero hoy se te hace más fácil ver los malos. Además te deja ver desde lejos lo que tienes pendiente de resolver y te facilita recordar que hay mucho por lo que estar agradecidos.

Permitirse estar lejos de "casa"

Esa distancia física que ponemos entre nosotros y lo que nos ocupa la mayor parte de los días no es la que hace la magia, el secreto lo tiene la distancia emocional que ponemos. Esa es una herramienta que puede ser muy poderosa, ya les he contado como me ayudó a sanar mi corazón roto después de la muerte de mi mamá.

Digo que puede ser muy poderosa porque tenemos que permitirnos esa distancia emocional para ver las cosas, somos nosotros quienes tenemos que elegir darnos ese permiso de salirnos de la rutina de pensamientos de confusión y en vez de eso buscar otros más agradecidos.

Si te vas a otro continente y te llevas el caos en la maleta, estarás lejos físicamente pero tu mente y corazón seguirán hilando la ansiedad. De corazón te invito a aprovechar ese momento privilegiado para hacer una pausa y encontrar la claridad. 

¿Será que se nos queda la claridad en el avión?

Ese arte de dar un paso atrás y ver las situaciones por lo que son realmente como lo hago en los viajes es algo que estoy incorporando a mi práctica diaria, con la ventaja de que ya sé que es posible (porque ya lo hice en el viaje, ¿por qué no repetirlo aquí y ahora?).

Se trata de bajar las revoluciones de la mente enredada y poner distancia emocional para volver a sentirnos seguros.

Puedo hacer una pausa y respirar con intensión como cuando pasé por una panadería en París y el olor de croissant recién horneado me enamoró. Así mismo puedo aquí y ahora respirar un rato, sintiendo realmente el olor del aire o mis músculos llevándolo a llenar mis pulmones. 

Los fines de semana puedo visitar un lugar con naturaleza para mirar con el mismo asombro que me dejó sin aliento al ver el desierto por primera vez en Perú. Puedo maravillarme en las mariposas del bosque o en la arquitectura de un hormiguero igual que como lo hice ese día entre las dunas.

O, lo que hago más seguido: simplemente ver el cielo con aquí en mi patio con la misma paz que me regaló un atardecer de mil tonos rosa en Cartagena. Es el mismo cielo hermoso, observarlo con agradecimiento me puede regalar el mismo sentimiento de paz que experimenté en ese atardecer.

Y luego de esos ratos de disfrute, de estar aquí y ahora, poniendo distancia entre mi y mis problemas puedo verlos con más claridad, porque ya recordé que soy más grande que ellos.

Mis queridos amigos viajeros, no se trata de comprar boletos aéreos para encontrar la claridad, pero les invito a disfrutar con máxima consciencia cuando están lejos, a aprovechar esa distancia emocional para ver más claro y regresar con una herramienta más para estar mejor.

¿Te gustaría planear tu propio viaje de reconexión? Te regalo mi Ebook Mapa de Ruta para planear tu viaje de reconexión donde te hablo sobre:

  • Los 12 pasos que uso para planear esos viajes con intención y conciencia que tanto disfruto
  • Una hoja para planear tu presupuesto
  • Preguntas poderosas que te ayudarán a conectar contigo durante todo el proceso. 

Descarga GRATIS tu Mapa de Ruta para planear un viaje de reconexión

Con tu suscripción recibirás en tu correo mi Ebook con los cada uno de los pasos para que tu viaje también sea para recordar quien eres y definir el camino que quieres seguir.

portada ebook3

* Un agradecimiento a Rebe Contreras de Mirada al Interior por compartirme la metáfora de la piscina, les invito a escuchar su podcast. 

0 comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Quiero suscribirme

Recibe como regalo el Ebook Mapa de ruta para planear tu viaje de reconexión.
Solo déjame estos datos: